Lujo y jerarquías sociales en la Nueva España en el periodo colonial
Resumen
No se cuenta con reseumen.
Descargas
Los datos de descargas todavía no están disponibles.
Citas
1 Datos tomados de Ramón María Serrera Contreras, "La organización de las Indias", cap. 3, en "Descubrimiento, colonización y emancipación de América'', Historia de España, Antonio Domínguez Ortiz (ed.), Barcelona, 1990, t. VIII, pp. 187-305.
2 Ramón María Serrera Contreras, Tráfico terrestre y red vial en las Indias españolas, Madrid, Dirección General de Tránsito/Lunwerg Editores, 1992.
3 Véase Ramón María Serrera Contreras, "Sociedad estamental y sistema colonial", en Varios autores, De los imperios a las naciones: Iberoamérica, Zaragoza, Ibercaja, 1994, cap. II, pp. 60-62.
4 Ibid, pp. 58-65.
5 Ramón María Serrera Contreras, "La organización de las Indias", op. cit., pp. 196-203.
6 Leonard Irving, La época barroca en el México colonial, México, FCE, 1986, p. 68.
7 Véase Nicolás Sánchez Albornoz, La población de América Latina, desde los tiempos precolombinos al año 2000, Madrid, Alianza Editorial, 1973, quien da una cifra de 200,000 mil personas, p. 89 y Magnus Mörner, Spanish Migration to the New World Prior to 1810. A State of Research Report, Estocolmo, Institut of Latin American Studies, 1974. El autor asienta la cifra de 250,000 y Richard Konetzke, América Latina. La época colonial, Madrid, 1971, asienta la cantidad de 300,000, p. 61.
8 Datos tomados de Woodrow Borah y Sherburne F. Cook, Ensayos sobre historia de la población: México y el Caribe, México, Siglo XXI Editores, 1978, p. 199. Para la gráfica núm. 1, hemos decidido colocar la población no india de México durante los años 1568-1570. Esto nos permite obtener un marco adecuado para estimar la primacía del grupo español sobre las otras dos categorías que utilizan los autores: mestizos y pardos. De la misma forma, sirve para estimar el aumento sostenido de este grupo social (el español) debido primordialmente a las migraciones. Esto da pauta para pensar que el influjo que ejercía la América española sobre la población peninsular era considerable.
9 Véase José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, México, Siglo XXI Editores, 1976, pp. 58-59.
10 Para la elaboración de este cuadro nos hemos basado en datos proporcionados por Wodroow Borah y Sherburne F. Cook, véase cita. Según los autores, este universo poblacional corresponde a tres zonas: la zona I, que incluiría a la Diócesis de México, Tlaxcala y Antequera (Oaxaca); la zona II, la diócesis de Michoacán, y la zona III, la Diócesis de Guadalajara o Nueva Galicia, p. 199.
11 Una descripción bastante veraz y cruda de las duras condiciones que existían en las flotas que anualmente salían del puerto de Sevilla y San Lúcar de Barrameda hacia los puertos americanos en el siglo XVI proviene de fray Tomás de la Torre. Este clérigo, que acompañaba a fray Bartolomé de las Casas y otros 46 religiosos en 1544, anotó en su diario las terribles condiciones de la travesía. De las mismas señala: "El navío es una cárcel muy estrecha y muy fuerte de donde nadie puede huir aunque no lleve grillos ni cadenas, y tan cruel que no hace diferencia entre los presos; igualmente los trata y estrecha a todos: es grande la estrechura y ahogamiento y calor, la cama es el suelo comúnmente ... Hay más en el navío mucho vómito y mala disposición que van como fuera de sí y muy desabridos, unos más tiempo que otros y algunos siempre; hay muy pocas cosas de comer y arróstrense mal las cosas dulces. La sed que se padece es increíble." "El cruce del Atlántico de Fray Tomás de la Torre, 1544", en Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, México, FCE, 1992, p. 30.
12 Enrique Otte, Cartas privadas de emigrantes a lndias, 1540-1616, Sevilla, Escuela de Estudios Hispanoamericanos, 1988; Isabel Macías Domínguez, Francisco Morales Padrón, Cartas desde América, 1700-1800, Sevilla, Consejería de Cultura y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, 1991.
13 Ramón María Serrera Contreras, "Sociedad estamental y sistema colonial", op. cit., p. 58.
14 lbid., pp. 58-65.
15 Datos tomados de Woodrow Borahy Sherburne F. Cook, Ensayos sobre historia de la población: México y el Caribe, op. cit., p. 200.
16 Ibid. Respecto a estas cifras, ambos autores plantean su nivel aproximativo. De todas formas sugieren que el porcentaje de población no india en México había aumentado de un 2.3 a un 4.2 por ciento sobre el total. El grupo español constituía el 61.2 por ciento, los mestizos el 8.3 por ciento y los pardos el 30.5 por ciento de ese subconjunto poblacional, pp. 199-200.
17 Thomas Gage, Nuevo reconocimiento de las Indias Occidentales, México, SEP/FCE, 1982, pp. 75-76.
18 Lbid, p. 76.
19 Ramón María Serrera Contreras, "Las Indias españolas en el siglo XVII", en Historia de España, op. cit., vol. VIII, cap. 4, p. 374.
20 Citado en La edad del oro, Barcelona, Edición de José Miguel Oviedo, 1986.
21 Alejandra Moreno Toscano, "El siglo de la conquista", en Historia General de México, México, El Colegio de México, 1977, t. II, p. 33.
22 Citado por José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, op. cit., p. 59.
23 Ramón María Serrera Contreras, Tráfico terrestre y red vial en las Indias españolas, op. cit., p. 285.
24 Juan de Dios Fernández de Sousa y Colegial, Carta consolatoria a la ciudad de Guanajuato, México, Gobierno del Estado de Guanajuato, 1987, p. 66.
25 Diego de Cisneros, "Sitio, naturaleza y propiedades de la ciudad de México", en Elías Trabulse, Historia de la ciencia en México, México, FCE, 1987, vol I: Siglo XVI, p. 432.
26 Leonard Irving, op. cit., 1992, p. 62.
27 lbid., en "El viaje de Francisco Carletti", pp. 89-90.
28 Archivo General de Indias, Sevilla, España (AGI), Indiferente general, 104, "Descripción de la ciudad de Puebla de los Ángeles en el año de 1746. Por Fray Juan de Villasánchez. Informe enviado por el mismo a las autoridades de España, Puebla de los Ángeles, 1746", f. 2.
29 AGI, México, 46, núm. 102, "El virrey de la Nueva España da cuenta a V.M. del recibo y obedecimiento de la Real Cédula del 1º de junio de 1672, tocante a la nueva celebración de la fiesta del Santo Rey Don Fernando", hoja 1f, bloque 2.
30 José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, op. cit., p. 117.
31 Citado por Ramón María Serrera Contreras, en "Sociedad estamental y sistema colonial", op. cit., pp. 58-65.
32 En este sentido es claro que la ostentación y el boato que aparecía en las urbes no era un fenómeno nuevo. Ya desde las primeras décadas del siglo XVI este fenómeno actuó como un acicate para la conformación de una verdadera aristocracia indiana, la cual, nacida al calor de las guerras de conquista, pugnó por fincar su alta estirpe. A partir de aquí se hizo necesario reafirmar, a través del lujo y la magnificencia de los conquistadores, un timbre de honra de las Indias frente a España. De hecho, José Durand afirma que tan aparatoso boato que engalanaba a los conquistadores surgió como réplica a las deslumbrantes cortes de algunas sociedades prehispánicas, como la azteca y la inca. Pero, al mismo tiempo, emergía como un sentimiento de orgullo por haber engrandecido los dominios imperiales. Véase José Durand, "El lujo indiano", Revista de Historia Mexicana, vol. VI, núm. 1, México, julio-septiembre de 1956, pp. 59-74.
33 Citado por Frederick P. Bowser, El esclavo africano en el Perú colonial, 1524-1650, México, Siglo XXI Editores, 1977, p. 236.
34 La vida del Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades, Madrid, Edición de Joseph V. Ricapito/Cátedra de Letras Hispánicas, 1984, p. 173.
35 Véase el interesante artículo de José Durand, "El lujo indiano", op. cit., pp. 58-73.
36 Ibid., p. 67.
37 Idem.
38 Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, op. cit., p. 81. El subrayado es mío.
39 Citado por Vicente Riva Palacio, México a través de los siglos, México, Cumbre, 1979, vol. II, p. 194.
40 Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, op. cit., p. 64.
41 José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, op. cit., p. 113.
42 Tomado de Ramón María Serrera Contreras, "Sociedad estamental y sistema colonial", op. cit., pp. 58-65.
43 Citado por José Durand, "El lujo indiano", op. cit., pp. 73-74.
44 Discurso del lujo de las señoras, por Abelardo Carillo y Gariel, edición facsimilar, Madrid, Imprenta Real, 1788; Madrid, Almaburu/José Esteban Editor, 1985, p. 28.
45 AGI, Indiferente General, 107, "Descripción de la ciudad de Puebla de los Ángeles en el año de 1746 por fray Juan de Villasánchez. Informe enviado por el mismo a las autoridades de España", Puebla de los Ángeles, 21 de octubre de 1746, f. 25.
46 AGI, Indiferente General, 107, "Descripción de la ciudad de Puebla de los Ángeles en el año de 1746, por fray Juan de Villasánchez. Informe enviado por el mismo a las autoridades de España", Puebla de los Ángeles, 21 de octubre de 1746, f. 26.
47 Thomas Gage, Nuevo reconocimiento de las Indias Occidentales, op. cit., p. 180.
48 Idem.
49 Véase Luisa Schell Hoberman, Mexico's Merchant Elite, 1590-1660. Silver State and Society, Duke University Press, 1989, p. 223. La autora considera que la riqueza, un matrimonio ventajoso, una mayor claridad en la piel y la adquisición de un título nobiliario fueron creando los escalones del ascenso social en el México colonial. A su juicio, la movilidad social en el siglo XVII fue algo flexible.
50 Véase el interesante artículo de Horst Pietschmann, "Estado colonial y mentalidad social: el ejercicio del poder frente a distintos sistemas de valores. Siglo XVIII", Revista de Historia Mexicana, vol. 35, núm. 10, pp. 427-447.
51 Ramón María Serrera Contreras, Tráfico terrestre y red vial en las Indias españolas, op. cit., pp. 286-287.
52 Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, op. cit., p. 81.
53 Thomas Gage, Nuevo reconocimiento de las Indias Occidentales, op. cit., p. 187.
54 Juan de Dios Fernández de Sousa y Colegial, Carta consolatoria a la ciudad de Guanajuato, op. cit., p. 65.
55 Archivo General de la Nación, México CAGN), "Sobre prohibir la venta de botones con imagenes religiosas. Carta de Joseph Antonio de los Ríos al Santo Oficio, Querétaro, 28 de mayo de 1770", Inquisición, vol. 1108, exp. 7 bis, f. 61f.
56 José Antonio Villaseñor y Sánchez, Suplemento al Theatro Americano, estudio preliminar, edición y notas de Ramón María Serrera Contreras, Sevilla, EEHA, 1977, p. 124.
57 AGI, Indiferente General, 2374-A, "Testimonio de los autos formados sobre que todas las personas de cualesquier estado, grado o condición que sean, ocurran a las Cajas de esta corte a manifestar las vajillas, piezas de oro y plata, para el quinto dentro del término asignado", México, 1745, f. 4v.
2 Ramón María Serrera Contreras, Tráfico terrestre y red vial en las Indias españolas, Madrid, Dirección General de Tránsito/Lunwerg Editores, 1992.
3 Véase Ramón María Serrera Contreras, "Sociedad estamental y sistema colonial", en Varios autores, De los imperios a las naciones: Iberoamérica, Zaragoza, Ibercaja, 1994, cap. II, pp. 60-62.
4 Ibid, pp. 58-65.
5 Ramón María Serrera Contreras, "La organización de las Indias", op. cit., pp. 196-203.
6 Leonard Irving, La época barroca en el México colonial, México, FCE, 1986, p. 68.
7 Véase Nicolás Sánchez Albornoz, La población de América Latina, desde los tiempos precolombinos al año 2000, Madrid, Alianza Editorial, 1973, quien da una cifra de 200,000 mil personas, p. 89 y Magnus Mörner, Spanish Migration to the New World Prior to 1810. A State of Research Report, Estocolmo, Institut of Latin American Studies, 1974. El autor asienta la cifra de 250,000 y Richard Konetzke, América Latina. La época colonial, Madrid, 1971, asienta la cantidad de 300,000, p. 61.
8 Datos tomados de Woodrow Borah y Sherburne F. Cook, Ensayos sobre historia de la población: México y el Caribe, México, Siglo XXI Editores, 1978, p. 199. Para la gráfica núm. 1, hemos decidido colocar la población no india de México durante los años 1568-1570. Esto nos permite obtener un marco adecuado para estimar la primacía del grupo español sobre las otras dos categorías que utilizan los autores: mestizos y pardos. De la misma forma, sirve para estimar el aumento sostenido de este grupo social (el español) debido primordialmente a las migraciones. Esto da pauta para pensar que el influjo que ejercía la América española sobre la población peninsular era considerable.
9 Véase José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, México, Siglo XXI Editores, 1976, pp. 58-59.
10 Para la elaboración de este cuadro nos hemos basado en datos proporcionados por Wodroow Borah y Sherburne F. Cook, véase cita. Según los autores, este universo poblacional corresponde a tres zonas: la zona I, que incluiría a la Diócesis de México, Tlaxcala y Antequera (Oaxaca); la zona II, la diócesis de Michoacán, y la zona III, la Diócesis de Guadalajara o Nueva Galicia, p. 199.
11 Una descripción bastante veraz y cruda de las duras condiciones que existían en las flotas que anualmente salían del puerto de Sevilla y San Lúcar de Barrameda hacia los puertos americanos en el siglo XVI proviene de fray Tomás de la Torre. Este clérigo, que acompañaba a fray Bartolomé de las Casas y otros 46 religiosos en 1544, anotó en su diario las terribles condiciones de la travesía. De las mismas señala: "El navío es una cárcel muy estrecha y muy fuerte de donde nadie puede huir aunque no lleve grillos ni cadenas, y tan cruel que no hace diferencia entre los presos; igualmente los trata y estrecha a todos: es grande la estrechura y ahogamiento y calor, la cama es el suelo comúnmente ... Hay más en el navío mucho vómito y mala disposición que van como fuera de sí y muy desabridos, unos más tiempo que otros y algunos siempre; hay muy pocas cosas de comer y arróstrense mal las cosas dulces. La sed que se padece es increíble." "El cruce del Atlántico de Fray Tomás de la Torre, 1544", en Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, México, FCE, 1992, p. 30.
12 Enrique Otte, Cartas privadas de emigrantes a lndias, 1540-1616, Sevilla, Escuela de Estudios Hispanoamericanos, 1988; Isabel Macías Domínguez, Francisco Morales Padrón, Cartas desde América, 1700-1800, Sevilla, Consejería de Cultura y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, 1991.
13 Ramón María Serrera Contreras, "Sociedad estamental y sistema colonial", op. cit., p. 58.
14 lbid., pp. 58-65.
15 Datos tomados de Woodrow Borahy Sherburne F. Cook, Ensayos sobre historia de la población: México y el Caribe, op. cit., p. 200.
16 Ibid. Respecto a estas cifras, ambos autores plantean su nivel aproximativo. De todas formas sugieren que el porcentaje de población no india en México había aumentado de un 2.3 a un 4.2 por ciento sobre el total. El grupo español constituía el 61.2 por ciento, los mestizos el 8.3 por ciento y los pardos el 30.5 por ciento de ese subconjunto poblacional, pp. 199-200.
17 Thomas Gage, Nuevo reconocimiento de las Indias Occidentales, México, SEP/FCE, 1982, pp. 75-76.
18 Lbid, p. 76.
19 Ramón María Serrera Contreras, "Las Indias españolas en el siglo XVII", en Historia de España, op. cit., vol. VIII, cap. 4, p. 374.
20 Citado en La edad del oro, Barcelona, Edición de José Miguel Oviedo, 1986.
21 Alejandra Moreno Toscano, "El siglo de la conquista", en Historia General de México, México, El Colegio de México, 1977, t. II, p. 33.
22 Citado por José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, op. cit., p. 59.
23 Ramón María Serrera Contreras, Tráfico terrestre y red vial en las Indias españolas, op. cit., p. 285.
24 Juan de Dios Fernández de Sousa y Colegial, Carta consolatoria a la ciudad de Guanajuato, México, Gobierno del Estado de Guanajuato, 1987, p. 66.
25 Diego de Cisneros, "Sitio, naturaleza y propiedades de la ciudad de México", en Elías Trabulse, Historia de la ciencia en México, México, FCE, 1987, vol I: Siglo XVI, p. 432.
26 Leonard Irving, op. cit., 1992, p. 62.
27 lbid., en "El viaje de Francisco Carletti", pp. 89-90.
28 Archivo General de Indias, Sevilla, España (AGI), Indiferente general, 104, "Descripción de la ciudad de Puebla de los Ángeles en el año de 1746. Por Fray Juan de Villasánchez. Informe enviado por el mismo a las autoridades de España, Puebla de los Ángeles, 1746", f. 2.
29 AGI, México, 46, núm. 102, "El virrey de la Nueva España da cuenta a V.M. del recibo y obedecimiento de la Real Cédula del 1º de junio de 1672, tocante a la nueva celebración de la fiesta del Santo Rey Don Fernando", hoja 1f, bloque 2.
30 José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, op. cit., p. 117.
31 Citado por Ramón María Serrera Contreras, en "Sociedad estamental y sistema colonial", op. cit., pp. 58-65.
32 En este sentido es claro que la ostentación y el boato que aparecía en las urbes no era un fenómeno nuevo. Ya desde las primeras décadas del siglo XVI este fenómeno actuó como un acicate para la conformación de una verdadera aristocracia indiana, la cual, nacida al calor de las guerras de conquista, pugnó por fincar su alta estirpe. A partir de aquí se hizo necesario reafirmar, a través del lujo y la magnificencia de los conquistadores, un timbre de honra de las Indias frente a España. De hecho, José Durand afirma que tan aparatoso boato que engalanaba a los conquistadores surgió como réplica a las deslumbrantes cortes de algunas sociedades prehispánicas, como la azteca y la inca. Pero, al mismo tiempo, emergía como un sentimiento de orgullo por haber engrandecido los dominios imperiales. Véase José Durand, "El lujo indiano", Revista de Historia Mexicana, vol. VI, núm. 1, México, julio-septiembre de 1956, pp. 59-74.
33 Citado por Frederick P. Bowser, El esclavo africano en el Perú colonial, 1524-1650, México, Siglo XXI Editores, 1977, p. 236.
34 La vida del Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades, Madrid, Edición de Joseph V. Ricapito/Cátedra de Letras Hispánicas, 1984, p. 173.
35 Véase el interesante artículo de José Durand, "El lujo indiano", op. cit., pp. 58-73.
36 Ibid., p. 67.
37 Idem.
38 Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, op. cit., p. 81. El subrayado es mío.
39 Citado por Vicente Riva Palacio, México a través de los siglos, México, Cumbre, 1979, vol. II, p. 194.
40 Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, op. cit., p. 64.
41 José Luis Romero, Latinoamérica: las ciudades y las ideas, op. cit., p. 113.
42 Tomado de Ramón María Serrera Contreras, "Sociedad estamental y sistema colonial", op. cit., pp. 58-65.
43 Citado por José Durand, "El lujo indiano", op. cit., pp. 73-74.
44 Discurso del lujo de las señoras, por Abelardo Carillo y Gariel, edición facsimilar, Madrid, Imprenta Real, 1788; Madrid, Almaburu/José Esteban Editor, 1985, p. 28.
45 AGI, Indiferente General, 107, "Descripción de la ciudad de Puebla de los Ángeles en el año de 1746 por fray Juan de Villasánchez. Informe enviado por el mismo a las autoridades de España", Puebla de los Ángeles, 21 de octubre de 1746, f. 25.
46 AGI, Indiferente General, 107, "Descripción de la ciudad de Puebla de los Ángeles en el año de 1746, por fray Juan de Villasánchez. Informe enviado por el mismo a las autoridades de España", Puebla de los Ángeles, 21 de octubre de 1746, f. 26.
47 Thomas Gage, Nuevo reconocimiento de las Indias Occidentales, op. cit., p. 180.
48 Idem.
49 Véase Luisa Schell Hoberman, Mexico's Merchant Elite, 1590-1660. Silver State and Society, Duke University Press, 1989, p. 223. La autora considera que la riqueza, un matrimonio ventajoso, una mayor claridad en la piel y la adquisición de un título nobiliario fueron creando los escalones del ascenso social en el México colonial. A su juicio, la movilidad social en el siglo XVII fue algo flexible.
50 Véase el interesante artículo de Horst Pietschmann, "Estado colonial y mentalidad social: el ejercicio del poder frente a distintos sistemas de valores. Siglo XVIII", Revista de Historia Mexicana, vol. 35, núm. 10, pp. 427-447.
51 Ramón María Serrera Contreras, Tráfico terrestre y red vial en las Indias españolas, op. cit., pp. 286-287.
52 Leonard Irving, Viajeros por la América Latina colonial, op. cit., p. 81.
53 Thomas Gage, Nuevo reconocimiento de las Indias Occidentales, op. cit., p. 187.
54 Juan de Dios Fernández de Sousa y Colegial, Carta consolatoria a la ciudad de Guanajuato, op. cit., p. 65.
55 Archivo General de la Nación, México CAGN), "Sobre prohibir la venta de botones con imagenes religiosas. Carta de Joseph Antonio de los Ríos al Santo Oficio, Querétaro, 28 de mayo de 1770", Inquisición, vol. 1108, exp. 7 bis, f. 61f.
56 José Antonio Villaseñor y Sánchez, Suplemento al Theatro Americano, estudio preliminar, edición y notas de Ramón María Serrera Contreras, Sevilla, EEHA, 1977, p. 124.
57 AGI, Indiferente General, 2374-A, "Testimonio de los autos formados sobre que todas las personas de cualesquier estado, grado o condición que sean, ocurran a las Cajas de esta corte a manifestar las vajillas, piezas de oro y plata, para el quinto dentro del término asignado", México, 1745, f. 4v.
Descargas
Publicado
1998-12-31
Cómo citar
Ruiz Medrano, C. R. (1998). Lujo y jerarquías sociales en la Nueva España en el periodo colonial. Historias, (41), 37–54. Recuperado a partir de https://revistas.inah.gob.mx/index.php/historias/article/view/13833
Número
Sección
Ensayos