El espíritu religioso en la Nueva España

Resumen

Reseña del libro “Antonio Rubial García, La hermana pobreza. El franciscanismo: de la Edad Media a la evangelización novohispana, México, UNAM, 1996, 264 pp.” Hace unos cuantos años, Antonio Rubial García publicó su obra El convento agustino y la sociedad novohispana (1533-1630). Posteriormente escribió otra obra acerca de la comunidad monástica de san Agustín: Una monarquía criolla (la provincia agustina en el siglo XVII). Sin duda, ambos trabajos aportaron mucha luz sobre la orden de san Agustín y la vida religiosa en la época colonial. Sin embargo, en esta ocasión, el trabajo que Rubial García nos ofrece está dedicado a la primera comunidad religiosa que llegó casi de la mano con los conquistadores españoles a tierras novohispanas: la orden de san Francisco de Asís, que, para la mayoría de los estudiosos de temas eclesiásticos, junto con la Compañía de Jesús, fue de las más importantes e influyentes entre las comunidades religiosas que se establecieron en la Nueva España. Entre otras razones, por su extraordinaria labor evangelizadora, sobre todo durante los primeros años de la conquista, y posteriormente, a mediados y finales del siglo XVII, por su constante y renovado espíritu religioso.