Un horno de cal en Hacienda Calderón, Morelos

Resumen

La exploración de un horno de cal prehispánico en Hacienda Calderón, Morelos, constituye un caso único en varios sentidos. Primero, porque la evidencia recuperada hace inequívoca su función: los materiales encontrados en el área de carga y de atizado, así como dentro de la cuba, son típicamente producto de la operación de un horno de cal. Segundo, porque la arquitectura del horno es la indicada para ese tipo de operación: se trata de un horno semienterrado, de cuba cilíndrica recubierta de basalto, y con puerta de alimentación de leña y retiro de cenizas de tamaño adecuado. Tercero, porque el horno está asociado a una operación prehispánica: el estucado de los paramentos de una construcción ubicada a un lado. Cuarto, porque los materiales arqueológicos recuperados y el contenido de radiocarbono en madera alimentada al horno produjeron fechas concordantes: el llamado Epiclásico del Altiplano. Quinto, por sus excepcionales condiciones de conservación, pues una vez concluido el trabajo de estucado el horno fue parcialmente desmantelado, tapado y sellado por el piso de estuco correspondiente a la superficie de circulación asociada al edificio. Finalmente, porque hornos similares en la población vecina de San Andrés de la Cal, los cuales operaron hasta fechas recientes, confirman nuestra interpretación a partir de materiales arqueológicos y detallan la operación del mismo.